Desafíos del turismo de Cruceros a la gestión urbana

Nunca antes en la historia habíamos tenido la posibilidad de viajar tan lejos y tan rápido. El relativo fácil acceso al transporte ha revolucionado la forma en que hacemos turismo. Desde un vuelo de bajo costo, que nos permite pernoctar en otra latitud en fin de semana, hasta una larga travesía marina, pasando por un viaje de aventura extrema, el turismo de largo alcance territorial se consolida como una práctica de la sociedad moderna.

Pero además de hacer un uso intensivo de las formas de transporte, este turismo global y a gran escala está imponiendo nuevos patrones de desarrollo a los destinos elegidos. Es por ello que sus gobiernos locales han de desplegar estrategias de gestión novedosas que acojan a esta creciente población flotante, al tiempo que concilian dicha práctica con los intereses y necesidades de la sociedad residente.

Es el caso del turismo de Cruceros. El Crucero ha evolucionado tanto en la oferta –ampliando sus circuitos y naves- como en la cantidad de la demanda –cada vez más gente puede permitírselo-. Su particularidad estriba en ofrecer un transporte marítimo y un complejo turístico a la vez, es decir, el viajero tiene la posibilidad de visitar diversidad de destinos sin tener que pernoctar en ellos.

Su auge está incorporado al crucerista al turismo de masas. Las posibilidades de combinación de transportes para desplazarse desde el lugar de origen del viajero hasta el puerto de embarque, así como su asequibilidad económica, han contribuido a aumentar exponencialmente las rutas en los mares interiores de regiones climáticas cálidas como Centroamérica y el Mediterráneo, vinculando así el mercado norteamericano y el europeo a estos circuitos.

Estas rutas están marcando nuevos desafíos a la gestión local de ciudades como Barcelona en España o Puntarenas en Costa Rica. A sus puertos marítimos llegan diariamente cruceristas que requieren servicios turísticos, de movilidad o de seguridad, entre otros. Por lo que es de vital importancia el despliegue de certeras estrategias de utilización del espacio urbano, que concilie los conflictos que se generan entre la actividad turística y la calidad de vida de sus moradores.

En 2015 Barcelona recibió 2,5 millones de cruceristas, convirtiéndose en el destino más popular de España. Gracias a la modernización de su infraestructura portuaria y conectividad aérea, la ciudad condal es punto de partida o final de muchos itinerarios marítimos. Si atendemos al número de cruceristas, barcos que atracan y pernoctan, actualmente el Puerto de Barcelona es el primero del Mediterráneo y el cuarto del mundo, tan solo detrás de los puertos de Florida, Estados Unidos (OTI, 2017).

Port Passengers, Barcelona. Fuente: Tomada de www.123rf.com

El éxito del puerto barcelonés se basa en una fórmula de gestión conjunta entre la Autoridad Portuaria y la iniciativa privada heredada de las Olimpiadas de 1992, mientras la primera atiende armadores, tripulaciones y turistas, la segunda se especializa en promoción turística. La estrategia actual consiste en atraer al crucerista de tránsito, con la intención de extender los beneficios económicos a toda la ciudad –alojamiento, restauración, etc.- transformando a Barcelona en el puerto base de Europa.

Más el aumento de cruceristas también impacta en la vida cotidiana de los habitantes de los barrios próximos al puerto de la ciudad condal. La presencia de turistas conlleva presión no solo sobre los servicios urbanos, sino también pone en cuestión los beneficios proclamados para sus moradores. Con el aumento del precio de la vivienda -por la demanda de alojamiento turístico-, el desplazamiento del comercio de proximidad por las tiendas de souvenires o restauración y la saturación o incluso el cierre de espacios públicos, los residentes ven mermada su calidad de vida, incluso en algunos casos les obliga a abandonar sus viviendas (mobbing inmobiliario).

Otro ejemplo es Puntarenas, Costa Rica. En los últimos años también este pequeño puerto está asistiendo al auge del turismo internacional de cruceros, ligado principalmente al mercado estadounidense. La llegada de viajeros a la costa pacífica comenzó en 2006 y en Puntarenas en 2010 pasando de 90 a 122  cruceros en el periodo 2013/2014. Sin embargo, los cruceristas cuentan con sólo una vía de acceso a la ciudad de dos carriles, uno por sentido, por lo que la llegada de dos cruceros a la vez llega a rebasar su capacidad de servicio (D. Brenes, 2017).

Muelle de Puntarenas y Vía 17, Angostura. Fuente: D. Brenes, 2017. Tomada de www.flickr.com

El impacto de esta actividad turística en la movilidad cotidiana de este paraíso del pacífico demanda una actuación pública. Por un lado, una mejor planeación de las vías de acceso, la ordenación del sistema de transporte y de las actividades económicas en el territorio, así como una jerarquización de sus usuarios. Y por otro, una gestión pública que proteja al comercio local y las actividades tradicionales que se están perdiendo, al tiempo que controle las prácticas monopolizadoras de los grandes touroperadores.

Es innegable que la modernización del sector de cruceros ha catapultado su crecimiento, pero también ha contribuido a generar nuevos desafíos a las administraciones de las ciudades que acogen día a día a este efímero viajero venido del mar. El desequilibrio entre este turismo intensivo y la actividad económica base se está traduciendo en nuevos problemas de gestión, ordenación y planeación urbana, además de imponer impactos negativos sobre la comunidad de acogida e incluso el medioambiente. Los gobiernos locales necesitan innovar con nuevos planes estratégicos que concilien el desarrollo de esta actividad turística con las legítimas de mandas de la sociedad residente.

Referencias

Brenes, D. (2017) Ordenamiento vial en la planeación de la ciudad de Puntarenas, Costa Rica, TFM, Centro Universitario Internacional de Barcelona – Universidad de Barcelona, mimeo.

OTI (2017) Proyectos localizados, el impacto del turismo de cruceros en Barcelona, Observatorio del Turismo Irresponsable, consultado el 14.07.2017, en http://oti.turismo-sostenible.net/project/el-impacto-de-turismo-de-cruceros-en-barcelona

PORT DE BARCELONA (2017) Port Barcelona, disponible en http://www.portdebarcelona.cat/es/web/port-del-ciudada/cruceros

Verónica Quiroz

Máster Universitario en Planificación Territorial y Gestión Ambiental