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Plan Nacional Integrado de Energía y Clima -PIEC 2021-2030: Aspectos Claves

 

 

El viernes 22 de febrero de 2019 el Consejo de Ministros Español aprobó el Denominado Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.  A continuación se toman algunos apartados, que consideramos importantes y sobresalientes sobre el documento en cuestión.  

 

 

  1. Introducción. El Origen

El marco de la política energética y climática en España está determinado por la Unión Europea (UE), condicionado por el Acuerdo de París - 2015. La Unión ratificó el Acuerdo en octubre de 2016, lo que permitió su entrada en vigor en noviembre de ese año. España hizo lo propio en 2017, estableciendo con ello el punto de partida para las políticas energéticas y de cambio climático en el horizonte próximo.

Este acuerdo faculta a los consumidores europeos para que se conviertan en actores activos en la transición energética y fija objetivos vinculantes para la UE en 2030:

  • 40% de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) respecto a 1990.
  • 32% de renovables sobre el consumo total de energía final bruta, para toda la UE.
  • 32,5% de mejora de la eficiencia energética.
  • 15% interconexión eléctrica de los Estados miembros.

El  Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030, identifica los retos y oportunidades a lo largo de las cinco dimensiones de la Unión de la Energía: la descarbonización, incluidas las energías renovables; la eficiencia energética; la seguridad energética; el mercado interior de la energía y la investigación, innovación y competitividad.

Dimensión 1: Descarbonización de la economía y avance en las renovables

El objetivo a largo plazo es convertir a España en un país neutro en carbono en 2050, para lo que se pretende conseguir un grado de mitigación de las emisiones brutas totales de gases de efecto invernadero (GEI) en esa fecha del 90% respecto a 1990, así el objetivo del Plan es lograr una disminución de emisiones de, al menos, el 20% respecto a 1990 en el año 2030.

Las medidas contempladas PIEC permitirán alcanzar un nivel de reducción de emisiones del 21%. Los objetivos son el 28% en el 2030 de los sectores difusos (residencial, transporte, agricultura, residuos, gases fluorados e industria no sujeta al comercio de emisiones), mientras que los sectores sujetos al comercio de derechos de emisión lo hacen con una disminución del 60%, ambos con respecto a las emisiones del 2005.

Dado que tres de cada cuatro toneladas de gases de efecto invernadero se originan en el sistema energético, su descarbonización es la piedra angular sobre la que desarrollar la transición energética y la descarbonización de la economía.

Los sectores de la economía que, en cifras absolutas, reducen más emisiones en ese período (2021-2030) son los de generación eléctrica (44 MtCO2-eq) y movilidad y transporte (28 MtCO2-eq), a los que se suman la industria (combustión)  y el sector residencial, comercial e institucional, con disminuciones adicionales de 7 MtCO2-eq en cada uno de ellos. Esos cuatro sectores considerados de forma  conjunta representan el 86%  de la reducción de emisiones en  el período 2021-2030.

El Plan prevé para el año 2030 una potencia total instalada en el sector eléctrico de 157 GW, de los que 50 GW serán energía eólica; 37 GW solar fotovoltaica; 27 GW ciclos combinados de gas; 16 GW hidráulica; 8 GW bombeo; 7 GW solar termoeléctrica; y 3 GW nuclear, así como cantidades menores de otras tecnologías.

La generación eléctrica renovable en 2030 será el 74% del total, coherente con una trayectoria hacia un sector eléctrico 100% renovable en 2050.

La principal fuerza motriz impulsora de la descarbonización del sector de la movilidad-transporte es la delimitación de zonas centrales con acceso limitado a los vehículos más emisores y contaminantes en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes, y la presencia de renovables en la movilidad-transporte; está alcanzará el 22% por medio de la electrificación (5 millones de vehículos eléctricos en 2030), lo anterior se acompaña con el uso uso de biocarburantes avanzados a más largo plazo y a que no más tarde de 2040 los vehículos que se comercialicen y matriculen en España sean vehículos con emisiones de 0 gCO2/km.

En definitiva, la presencia de las renovables sobre el uso final de la energía se incrementa del 20% previsto para el año 2020 al 42% en 2030.

Dimensión 2. Eficiencia energética

El PIEC asume como objetivo de mejora de la eficiencia energética el formulado por la Directiva de Eficiencia Energética del 32,5%, si bien en el Plan la reducción del consumo de energía primaria —con respecto al escenario tendencial europeo— es del 39,6% en 2030.

El Plan propone iniciativas para el cumplimiento del objetivo de renovación del parque edificatorio público fijado en la Directiva de Eficiencia Energética (3%) y evalúa e impulsa los ahorros que podrían obtenerse de la renovación adicional de 300.000 m2/año en la Administración General del Estado. 

Salvo la renovación de edificios y los programas de eficiencia energética en el sector PIEC no presenta mayores estrategias en relación a este objetivo.

 

 

 

 

Dimensión 3: Seguridad energética

Dados los cambios en el mix energético que plantea el PIEC, suministrar energía segura, limpia y eficiente a los distintos sectores consumidores implica importantes retos y dificultades tecnológicas, que es necesario abordar desde los distintos planos que conforman la seguridad energética:

  • Reducción de la dependencia, en especial la importación de combustibles fósiles.
  • Diversificación de fuentes de energía y suministro.
  • Preparación ante posibles limitaciones o interrupciones de suministro.
  • Aumento de la flexibilidad del sistema energético nacional.

Tras la aplicación de las medidas incluidas en este Plan Nacional, el uso de renovables, eficiencia y reducción de importaciones bajarán el grado de dependencia del exterior del 74% en 2017 al 59% en 2030, lo que además de mejorar la seguridad energética nacional tendrá un impacto muy favorable sobre la balanza comercial energética de nuestro país. Las medidas propuestas incluyen:

  • Aumentar la interconexión eléctrica de los sistemas, lo que contribuirá a reducir los posibles impactos negativos por limitaciones o interrupciones del suministro.
  • Optimizar el uso de la capacidad existente mediante la reducción de barreras al intercambio de energía eléctrica
  • Profundizar en la preparación ante contingencias en  el  marco de los distintos ámbitos internacionales en los que está comprometida España: Agencia Internacional de la Energía (AIE) y distintas directivas y reglamentos de la UE para el sector eléctrico y gas.
  • Desarrollar la Estrategia de Seguridad Nacional, a través del recientemente creado Comité Especializado de Seguridad Energética.
  • Adaptarse al nuevo reglamento europeo sobre la preparación frente a los riesgos en el sector de la electricidad.
  • Mejorar los distintos planes preventivos y de emergencias en el ámbito del suministro  eléctrico, gasista y de derivados petrolíferos.

 

Dimensión 4. Mercado interior de la energía

La integración de la generación renovable en el sector eléctrico hace necesario el refuerzo y crecimiento de las líneas de transporte y distribución en territorio español, incluyendo las conexiones peninsulares, los sistemas no peninsulares e interconexiones entre sistemas insulares. El Plan se ocupa de todos estos aspectos, así como del desarrollo de mecanismos de gestión y almacenamiento de renovables eléctricas no gestionables que permitan evitar vertidos.

En el ámbito comunitario, el grado de interconexión del sistema eléctrico ibérico con el resto  del continente europeo se encuentra por debajo de los objetivos establecidos. La ratio de interconexión  de España es inferior al 5% de  la capacidad de generación instalada en  el sistema. En 2020, incluso con las interconexiones previstas, nuestro país será el único de la Unión Europea por debajo del objetivo del 10%, por lo que será necesario seguir desarrollando nuevas interconexiones:

  • Nueva interconexión con Portugal, que permitirá aumentar la capacidad de intercambio hasta los 3.000 MW.
  • Nuevas interconexiones con Francia, que aumentarán la capacidad de interconexión hasta los 8.000 MW:
    • Proyecto del Golfo de Vizcaya: entre Aquitania (FR) y el País Vasco (ES).
    • Interconexión entre Aragón (ES) y Pirineos Atlánticos (FR).
  • Interconexión entre Navarra (ES) y Landas (FR).

 

El Plan tiene en cuenta la nueva Estrategia Nacional contra la Pobreza Energética. Esta Estrategia se configura como un instrumento que permite abordar el fenómeno de la pobreza energética desde una perspectiva integral y con visión a medio y largo plazo.

Dimensión 5. Investigación, innovación y competitividad

La Unión de la Energía incorpora un ámbito sobre investigación, innovación y competitividad en el que ocupa un papel principal el Plan Estratégico de Tecnologías Energéticas (SET-Plan), que ha sido desde 2007 el pilar de I+i de la política europea sobre energía y clima.

Las actividades de I+i+c orientadas a luchar contra el cambio climático y a favorecer la transición energética se articulan en las siguientes líneas de trabajo:

  • Eficiencia Energética, caracterizada por su transversalidad en cuanto a tecnologías y sectores afectados.
  • Tecnologías de energías renovables:
    • Aquellas en las que España ya tiene una posición competitiva, con alto nivel de participación de sus empresas, como la eólica, la solar fotovoltaica y la solar termoeléctrica.
    • Los combustibles renovables para el sector del transporte, en particular el desarrollo de los biocarburantes avanzados.
    • Otras en las que España cuenta con recursos naturales significativos y un potencial de implementación local suficiente como para desarrollar las curvas de aprendizaje tecnológico: energía eólica off-shore, biomasa, energías marinas, residuos, así como la geotermia de baja entalpía.
  • Flexibilidad y optimización del sistema energético mediante la implementación de tecnologías que aporten flexibilidad al sistema eléctrico, esencial para alcanzar un alto grado de penetración en el sistema de generación renovable no gestionable.
    • Almacenamiento eléctrico, con y sin vehículo eléctrico, y participación de la demanda en la operación del sistema. En ese sentido, es importante promover el desarrollo de un sistema nacional de fabricación de estos equipos, para lo que harán falta inversiones en I+i+c.
    • Almacenamiento térmico para tecnologías solares termoeléctricas.
    • Almacenamiento hidroeléctrico.
    • Almacenamiento químico en forma de hidrógeno, bien empleando electrólisis y consumo en pilas de combustible, o bien inyectándolo a la red.
  • Vehículo eléctrico: baterías e instalación y optimización de puntos de recarga.
  • Captura, almacenamiento y uso de carbono.
  • Impacto económico, de empleo, distributivo y sobre la salud del PIEC, 2021-2030

Las inversiones totales para lograr los objetivos del Plan alcanzan los 236.124 M€ entre 2021 y 2030. Las inversiones totales se distribuyen en:

  • Inversiones en ahorro y eficiencia: 37% (86.476 M).
  • Renovables: 42% (101.636M)
  • Redes y electrificación de la economía: 18% (41.846M).
  • Difusos no energéticos y otras eléctricas: 3% (6.166M).

De acuerdo con el estudio realizado, el 80% de la inversión será realizada por el sector privado  y sólo el 20% por el público.

El PIEC prevé que generará un aumento del PIB  de un 1,8% del PIB en 2030 y unos 364.000 empleos adicionales en 2030.Adicional un ahorro acumulado en importaciones de combustibles fósiles entre 2021-2030 de 75.379 M€.

 

 

Coordinador del Máster en Energías Renovables y Sostenibilidad Energética Rodrigo Ramírez-Pisco. PhD.

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